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Dificultad para tragar: Conozca las causas y efectos de la disfagia

por Guilherme Sauniti
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¿Sabes qué significa el término disfagia? ¿Has oído esta palabra en algún lugar antes? Si nunca has oído hablar de ella, siendo un verdadero marinero de primera viaje, sin saber nada al respecto, déjanos contarte lo que significa.

La disfagia es simplemente una dificultad para tragar, deglutir o ingerir líquidos o alimentos sólidos, es decir, llevar el bolo alimenticio de la garganta al estómago, pudiendo ocurrir con cualquier persona, en cualquier edad y en cualquier momento de la vida.

Pero, ¿cuáles son las causas y los efectos que la disfagia provoca en nuestro organismo?

Vamos, entonces, a conocer cada una.

Dificultad para tragar: Conozca las principales causas

Hablar sobre las principales causas cuando nos referimos a algún síntoma, la mayoría de las veces es un poco complejo y hasta puede parecer extraño; pues, el cuerpo humano es siempre un misterio y cada organismo se comporta de una manera.

Sin embargo, ¿y la disfagia?

Pero, en el caso de la disfagia, dificultad para tragar, sabemos básicamente que es una alteración que puede ser causada por lesiones estructurales o funcionales de la región del esófago. El esófago es un tubo que lleva el alimento hasta el estómago, tanto líquidos como sólidos.

Para una mejor comprensión dividimos estas causas en tres niveles: simples, importantes y graves.

Causas simples

En un primer momento, refiriéndonos a causas simples, pueden no tratarse de alguna enfermedad que cause preocupaciones, sino simplemente de un hábito que es un villano no sólo para la salud de nuestra garganta, sino también para la de nuestros dientes y boca en general.

Hablo de una alimentación incorrecta, causada por:

  • Una masticación rápida e inadecuada;
  • Intento de tragar alimentos muy grandes;
  • Alimentos muy calientes;
  • Intentar tragar hablando o riendo; 
  • Uno de los peores, intentar comer estando casi acostado.

Muchos piensan que esto es una gran tontería, que no influye en nada, pero si esto no fuera tan serio y afectara directamente nuestra salud, ¿otros profesionales de la salud, además de gastroenterólogos y dentistas, también darían las mismas orientaciones?

¡Por supuesto que no!

Estas orientaciones, siempre insistidas por nuestros padres desde la infancia, que nos acompañan a lo largo de la vida, hacen mucha diferencia.

Esto se debe a que tales malos hábitos pueden provocar la evolución de los síntomas, como la disfagia funcional o motora, que son trastornos musculares o neurológicos de los órganos que forman parte del proceso de deglución, es decir, enfermedades de los músculos del esófago y de los nervios que hacen funcionar el esófago, científicamente hablando.

¿Ves cómo un simple detalle, como alimentarse con calma y tranquilidad, puede tener un efecto positivo y preventivo para nosotros?

Si no has seguido estos pasos, a través de los tirones de orejas de tus padres hasta hoy, no dejes de seguirlos a partir de ahora, ¿vale?

Causas importantes

En este segundo momento, vamos a conocer algunas causas importantes que requieren un poco más de atención y que también pueden estar asociadas a la dificultad para tragar, como:

  • Acalasia: es un raro trastorno que dificulta la entrada de líquidos en el estómago que, además de la dificultad para tragar, que es característica típica, también cuenta con la presencia de la indeseable acidez;
  • Atragantamiento: Se trata de una momentánea parálisis respiratoria causada por un bloqueo en la tráquea, contando con cianosis y tos; y 
  • Reflujo gastroesofágico: es el retorno del ácido del estómago, a la parte inicial de la tráquea, desencadenando una irritación de la mucosa, también contando con síntomas como: boca amarga y tos después de las comidas.

¿Ves cuánto la falta de cuidados básicos puede, a medio y largo plazo, desencadenar la evolución hacia molestias aún mayores?

¡Estate atento!

Causas graves

Y en tercer lugar, sobre las causas “graves”, algunas son originadas por problemas un poco más severos, pudiendo ser, incluso, permanentes, conforme se describe a continuación:

  • Accidente cerebrovascular (ACV);
  • Enfermedad de Huntington;
  • Enfermedad de Parkinson;
  • Esclerosis múltiple;
  • Enfermedad de Alzheimer; 
  • Parálisis cerebral;
  • Cáncer de esófago.

Incluso una pequeña molestia, puede convertirse en algo más serio, por eso, después de aprender un poco sobre las causas de la disfagia, ¿vamos a ver cómo diagnosticar?

¿Cómo se diagnostica la disfagia?

Sepa que si la persona está con algunos de los síntomas primarios informados anteriormente, si se mantienen por días, debe buscar al especialista lo más pronto posible; pues con seguridad él realizará algunos exámenes, como, por ejemplo:

  • Prueba de deglución: que busca identificar irregularidades en la musculatura de la boca o garganta;
  • Endoscopia digestiva: para el análisis de los órganos que componen el aparato digestivo como boca, esófago y estómago;
  • Rayos X con contraste: para una visualización más precisa de la anatomía del esófago y estómago; 
  • Manometría: prueba más específica para verificar el funcionamiento de los músculos del esófago.

Con el diagnóstico correcto en manos, es mucho más fácil iniciar previamente el tratamiento correcto e inhibir mayores complicaciones. Entonces, ¿qué tal conocer los tratamientos más indicados?

¿Cuáles son los tratamientos más indicados para la disfagia?

Entrando ahora en el campo de los tratamientos, obviamente toda la terapéutica debe ir al encuentro del foco del problema, que dependerá directamente de lo que ocasionó la dificultad para tragar.

Los tratamientos más conocidos son:

  • Ejercicios para fortalecimiento muscular: siendo las conocidas terapias de rehabilitación de los músculos responsables del proceso de deglución;
  • Medicamentos: los medicamentos que controlan la producción de ácido pueden ser indicados para ayudar en el control de los síntomas;
  • Cirugía: en casos más graves, el camino más indicado puede ser la intervención quirúrgica. 

Estos son los tratamientos importantes, sin embargo, prevenir tomando algunas precauciones aún es útil, veamos…

Cuidados para quien tiene dificultad para tragar

Conociendo un poco más sobre la dificultad para tragar o disfagia, sus causas y los tratamientos más adecuados, algunos consejos para evitar estos indeseables síntomas son más que bienvenidos.

Y ya sabes cuáles son, recapitulando…

  • Alimentarse, evitando alimentos muy grandes, es indispensable;
  • Las verduras y alimentos más rígidos deben estar bien cocidos;
  • Variar las comidas optando por alimentos blandos como sopas cremosas, por ejemplo;
  • Evitar jugos aguados, pues causan atragantamientos con más facilidad; 
  • Por último, masticar bien los alimentos.

¿Ves cómo es fácil, observar nuestra rutina y corregir pequeñas acciones? Basta seguir algunas de estas orientaciones.

Conclusión

Si te gustó saber un poco más sobre el tema dificultad para tragar, la disfagia, y deseas estar siempre al tanto de información relevante para la salud del aparato digestivo, mantente atento al Gastroblog.

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Doutor em Gastroenterologia pela FM-USP.
Especialista em Cirurgia do Aparelho Digestivo (HCFMUSP), Endoscopia Digestiva (SOBED) e Gastroenterologia (FBG).
Professor do curso de Medicina da Fundação Educacional do Município de Assis - FEMA.
Médico da clínica Gastrosaúde de Marília.


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